Haber dedicado tantas y tantas horas a este parque, realizando este humilde blog, me ha servido para muchas cosas. No las citaré, quiero ser breve, sólo diré que la más importante de todas, como todo en la vida, es el contacto humano, el haber conocido a un puñado de personas (aunque tan sólo sea un poquito) hace que me sienta más que satisfecho. Recibir ayuda desinteresadamente es lo que más me ha apasionado de este apasionante trabajo que estoy haciendo. Descubrir a otras personas amantes del patrimonio, de nuestra historia, de nuestro pueblo, me hace sentirme un poquito más a gusto y menos solo en este mundo tan duro y sin sentido.
Hoy subo unas fotos de una familia, una, como otra cualquiera, de las que visitó el parque. Lo hizo en el momento en que la maleza y los escombros abandonaron el parque y dejaron a la vista lo que el tiempo y la desidia habían ocultado por décadas.
Querría enviar un agradecimiento por compartir al niño de las fotos, agradecimiento acompañado de un abrazo inmenso, un abrazo lleno de energía y fuerza.
Yo quedé fascinada con ese parque. ¡Ojalá que pronto al ayuntamiento consiga fondos para renovarlo! ¡Es una joya!
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